Venezuela 2010, annus horribilis.

22-01-2010 - Eduardo Guerra

Sin animo de ser pesimista, y con la intención de hacer algunos pronósticos de lo que estimo, será el año 2010 para todos los habitantes de Venezuela, me atreveré a comentar algunas ideas de lo puede llegar a pasar en la octava isla, en el ámbito político y social.

Dado que el próximo 26 de septiembre se elegirán 164 diputados de la Asamblea Nacional, podemos decir que el país estará signado por el tema electoral, razón por la cual será fácil adivinar que se incrementará el conflicto social, y aumentará la violencia política a lo largo de todo el país.

Hugo Chávez aparece en todas las encuestas bajando abruptamente sus índices de popularidad, y es lógico; después de casi once años de gobierno sigue el desempleo y la inflación afectando a la población más necesitada, y ahora intensamente, después de la terrible devaluación del Bolívar fuerte. La inseguridad personal y la violencia desatada por la delincuencia, los secuestros express, y los más de 19.000 homicidios del año 2009, hacen mucho peso al único candidato que pareciera se presentara por el chavismo, el teniente coronel.

La estrategia del Gobierno es la misma, convertir estas elecciones en un referéndum polarizado entre Hugo Chávez y la oposición, y claro esta, las encuestas también dicen que él es el político de más arrastre en el país, a pesar de la baja de su popularidad. Chávez se crece en las campañas electorales, pero en esta oportunidad tendrá que lidiar con el grave problema nacional de la escasez de agua, y del inexplicable problema del racionamiento de la electricidad. Esos dos factores pueden ser potenciadores y aceleradores de su derrota, dado que ya se sabe que no los podrá resolver del todo de aquí al mes de agosto. De hecho la paradoja de un país tan rico como Venezuela, es que su población depende hoy por hoy del azar que llueva y se llenen los embalses de agua, atenuando el racionamiento de energía eléctrica, y que el petróleo aumente significativamente su precio para que el problema económico se pueda, al menos aguantar por la entrada abundante de divisas.

Otro escenario posible es el de la amenaza de guerra.

El Comandante al ver perdida la Asamblea Nacional, a pesar de controlar a su antojo al resto de los poderes, y sobre todo el CNE, con todo y el cambio tramposo de los circuitos electorales, ese que hicieron las ilegítimas e inconstitucionales Rectoras, tendrá la posibilidad de buscar la guerra con Colombia; tomando en cuenta que el Presidente Uribe continúa ejecutando un fuerte ataque militar contra las guerrillas colombianas con el apoyo de los Estados Unidos. Chávez puede verse tentado a ayudar a las FARC y al ELN, buscando la unión con las Fuerzas Armadas de Liberación Bolivarianas, es decir su propia guerrilla venezolana, las que junto con las recién creadas Milicias Bolivarianas se convertirían en una “amenaza” para Colombia. Las millonarias compras de Venezuela de armamento pesado ruso y de aviones cazas de combate, tendrían entonces su explicación, y a eso, habría que sumarle que en Colombia empiezan a tomarse en serio las continuas amenazas de Chávez, y ya anuncian una movilización de tropas del ejercito colombiano a lo largo de las fronteras. Hugo Chávez denuncia que Colombia se quiere convertir en el Israel de America Latina, pero no se da cuenta que corre el riesgo que Venezuela se convierta en el Líbano latinoamericano. Este escenario de la guerra parece remoto, pero el teniente coronel es capaz de hacer lo que sea para mantenerse en el poder.

Para completar el cuadro siniestro que el teniente coronel le tiene preparado a los venezolanos, habría que decir que continúa el proceso de ideologización castro comunista, que la estrategia de Fidel Castro va viento en popa, que sigue avanzando, en los colegios, en los sindicatos, en la cultura, en el deporte, en las fuerzas armadas, en la economía, en las universidades, en todos los ámbitos de la vida social de los ciudadanos. Eso ya produce sensación de agobio en la población, de la perdida de sus espacios. Perdida que se refleja en las restricciones a la libertad de expresión; con su método de dos pasitos pa´lante, un pasito pa´tras, en la Asamblea Nacional siguen aprobando leyes copiadas de la Cuba castrista. El Presidente Chávez sigue metiendo decretos leyes de todo tipo, de confiscaciones de la propiedad privada, y pare Ud. de contar. El miedo, el chantaje y las amenazas a la población de todas las clases sociales, son las tácticas comunes en la ejecución del perverso plan castro-chavista.

Finalmente y del otro lado esta la oposición, dispersa, asustada, desorientada. Hay que tomar en cuenta que esta oposición la conforman diversos grupos ideológicos y de distintas tendencias, desde Bandera Roja de extrema izquierda, hasta grupos de exmilitares derechitas, pasando por todos los partidos de la Internacional Socialista y la Social Democracia. Hay que reconocer que ponerse de acuerdo para ellos no es fácil, que sus propios intereses pesan en sus decisiones de políticas unitarias.

Sumado a este crisol de personajes e ideas de los adversarios del Presidente, se le agrega la intervención del dinero chavista en las filas de la oposición, de la penetración del gobierno buscando dividirlos, controlarlos, desquiciándolos.

Afortunadamente después de muchos errores cometidos, al parecer, la Mesa de la Unidad opositora lograra llevar en la mayoría de los circuitos electorales un solo candidato, cosa que asusta verdaderamente al Presidente Chávez.

Toca advertir que ganar la Asamblea Nacional, seria un gran paso para las fuerzas opositoras, pero no suficiente. Los diputados que se elijan deberán ser personas de mucho coraje, inteligencia y valentía, por que lo que les espera por parte del castro-chavismo será terrible. El trabajo de la unión anti chavista habrá que proyectarlo como una estrategia de gran alcance, capaz de enfrentar el modelo totalitario de Hugo Chávez, que rescate la libertad perdida de los venezolanos.

Todo el país sabe que Chávez no entregara por las buenas el poder en diciembre de 2012, aunque perdiera las elecciones por paliza.

Venezuela 2010, annus horribilis, es verdad, pero con posibilidades de convertirlo en el año de la esperanza, del retorno a la libertad, si nos empeñamos…