viernes, 27 de marzo de 2009

Corralito a la Bolivariana.

27-03-09 - Eduardo Guerra
Una vez superada la coyuntura política que él mismo creo con el enmiendazo del 15F, el pasado 21 de marzo el Presidente Hugo Chávez, finalmente anuncio las medidas con la que aspira enfrentar la crisis económica que se vive en Venezuela.
Luego de pasearse varias horas por diversos temas y dando mas vueltas que un perro al echarse, en una la larga cadena nacional dio a conocer algunas medidas económicas, mas bien flojas de acción, como pañitos calientes. No fueron tan fieras y agresivas como las que espera todo el país, pero en apariencia solamente…
Al parecer la tensión y crispación que se vivió en el país las horas previas a su anuncio eran de tal magnitud, que el teniente coronel no se atrevió, por recomendación de la sala situacional de Miraflores, a tomar las dolorosas medidas que habría que ejecutar en casos como este.

El problema principal con las recetas chavistas es que son injustas e insuficientes. El Comandante le dijo a todos los venezolanos que ahora tienen que sacrificarse, pero eso si, sacrificio para el Gobierno NO.
Entre otras medidas anuncio lo siguiente:
1º) Aumento del IVA de 9% a 12%; 2º) Rebaja del presupuesto en el orden de 11.1 millardos de bolívares fuertes (Bs.F.); 3º) Un súper plan de endeudamiento de 37,32 millardos de Bs.F. 4º) Reducción de los sueldos de los altos funcionarios y eliminación de los gastos suntuarios. 5º) Aumento general del salario mínimo del 21%, en dos etapas (10% el 1º de mayo y 11% el 1º de septiembre).

¿Y por que decimos que son injustas estas medidas?

- Porque el aumento del IVA disparara aun más la inflación este año 2009, la cual se estima estará por encima del 40%, y eso lo pagara todo el pueblo.
- Porque la rebaja del presupuesto afectara quiera o no a las misiones, los mercal, etcétera, por mas que el Presidente prometa que no afectara los planes sociales; a sabiendas que él lo hace no por conciencia, sino porque simplemente no tiene la abundancia de dólares de antes.
- Lo más grave a mi juicio, es aumentar en extremo la deuda consolidada del país. Como pedir dinero al Banco Mundial o al FMI seria una vergüenza y una contradicción con su discurso populista, al margen que no se lo darían; Chávez ahora se dispone a “obligar” a la banca nacional a financiar todo el déficit que tiene por la importante merma de las exportaciones de petróleo. Y decimos que obligara a la banca entre comillas, porque para la mayoría de los banqueros este mecanismo resultara un jugoso negocio que servirá para incrementar los chanchullos y la corrupción entre los funcionarios chavista y algunos de ellos. La Asociación Bancaria de Venezuela a través de su Presidente, Víctor Vargas Irausquín, señalo que la “toma de decisiones de política económica por parte del Gobierno Nacional fue no sólo oportuna sino necesaria, toda vez que es preciso prevenir los efectos de la crisis financiera internacional sobre nuestra economía”; el Presidente Chávez fue menos fino en su expresión, dijo que “la banca esta buchona y es la hora de ayudar al país”. Lo novedoso y altamente peligroso de esta propuesta de Chávez, es que la banca le dará al Gobierno los 37.32 millardos de Bs.F. tomándolos de las 20 millones de cuentas de ahorro y cuentas corrientes que los venezolanos tienen depositado en esos bancos. La verdadera tragedia, el corralito a la bolivariana, es que ese dinero se entregara a cambio de bonos del Estado Venezolano, más devaluados y desprestigiados que nunca. Ni el Banco Central de Venezuela (BCV), ni Petróleos de Venezuela (PDVSA) pueden ser fiadores del Gobierno por los pésimos resultados financieros que han mostrado hasta ahora. Pero no conforme con eso, el Presidente Chávez también anuncio que podría tomar del BCV el encaje legal bancario, equivalente al 20% del total depositado por los ahorristas en la banca, también a cambio de mas papeles basura, que de consumarse esta acción dejaría sin respaldo alguno todo el dinero que esta en la calle, creando adicionalmente más presión inflacionaria al aumentar vertiginosamente el circulante. A fin de cuentas a los banqueros (salvo honrosas excepciones) no les importara perder sus bancos si el Gobierno no les paga, ya ellos convirtieron en dólares todo su capital y lo tienen en bancos fuera del país. Ya son lo suficientemente ricos para jugar el juego del Presidente. Es una nueva forma de estatización de la banca. ¿Quién lo diría? La revolución roja rojita aliada con la más rabiosa burguesía bancaria… ¡Un neo corralito bolivariano! ¡Una pirámide más! ¡Un monte de piedad cualquiera!
- En cuanto a la reducción de los salarios de los altos funcionarios, ya firmo el decreto, no sin antes hacer un show frente a las cámaras de TV, en que les pidió a todos los compinches rojitos beneficiados con bonos y altos sueldos que “devuelven el dinero” haciéndole ver al pueblo que él no sabia nada de eso, que no tenia idea de lo que ganaban, ni del despilfarro, ni de nada.
- Con respecto al aumento general de salario la cosa es muy simple, aumentara un 21%, lo que nunca compensara la inflación del 35% del año 2008. Una clara pérdida del valor adquisitivo de los más pobres. Simple, les ofrece a los que ganan salario mínimo un 21% de aumento, con lo que los asalariados empezaran el mes de abril con una perdida de al menos el 14% de su poder adquisitivo.

También aseguramos que son medidas insuficientes, porque Hugo Chávez dejo por fuera el aumento de la gasolina (no se puede seguir botando 6.000 millones de dólares al año solo por el consumo nacional de combustible); porque el líder máximo de la revolución aseguro que no devaluara el Bs.F., y por otro lado advierte que no habrá dólares en CADIVI para todas importaciones, lo que obligara a ir al mercado negro (dólar permuta) a los importadores de insumos para la producción y del comercio en general, elevando significativamente los precios al consumidor final. Tampoco menciono las tarifas de la electricidad, teléfonos y el tan temido impuesto al debito bancario.

Finalmente, toda esta alocada estrategia económica financiera esta montada sobre la base de que el petróleo venezolano volverá a subir promedio, entre 70 y 80 dólares por barril. No importa que sea altamente improbable ese escenario, lo que importa es que el Presidente Chávez no tenga que pagar políticamente con la baja de su popularidad. A costa de lo que sea, de la ruina de un país con todos sus habitantes. Seguirá corriendo la arruga, y tristemente todo ese sacrificio de los venezolanos se perderá por una revolución roja rojita de pacotilla…

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