Nicaragua ¿Una franquicia bolivariana a prueba de error?

23-10-09 - Eduardo Guerra

Ahora le toca mover ficha al Presidente nicaragüense Daniel Ortega en su ejecución de la franquicia bolivariana. El próximo paso, lograr la posibilidad de su reelección a toda costa, aunque sea violando la Constitución. ¿Lo mismo que hizo Hugo Chávez en su día?

En Nicaragua se reformo la Constitución en el año 1995, estableciendo la prohibición de la reelección presidencial continua; solo se permite la reelección alterna tras cumplirse un mandato alternativo. Ortega no podía presentarse a la reelección por estar fuera de los límites que establece el artículo 147 de la misma, que describe claramente la imposibilidad de renovar el mandato de forma consecutiva.
Pero para el discípulo de Chávez esto no es un problema. La franquicia bolivariana le dio las alternativas de solución. Con la misma receta chavista intentaron modificar la ley en el Congreso de Diputados, pero no lograron los 56 votos necesarios. Como la vía legislativa no les funciono, el franquiciador Master desde Miraflores, le ordeno buscar la vía judicial e intentaron rebajar el número de magistrados de la Corte Suprema de Justicia, con la idea de sacar a los magistrados de inclinación liberal y dejar solo al grupo de jueces allegados a los sandinistas. Ahora bien, como esta estratagema tampoco coló, seis magistrados sandinistas, entre gallos y media noche, y sin convocar al resto de los magistrados, declararon inaplicable el artículo 147 de la Constitución, que prohíbe la reelección consecutiva del presidente. De esta manera, la Corte falló a favor del recurso de amparo presentado por un abogado de Ortega; la sentencia favoreció al mandatario y a los 109 alcaldes sandinistas; en su razonamiento la sala constitucional alegó que impedir la reelección presidencial y, al mismo tiempo, permitir la reelección indefinida de los diputados es una “violación al derecho de la igualdad ante la ley”.
El presidente de la CSJ, Manuel Martínez, tildó de emboscada al Poder Judicial porque los magistrados sandinistas no convocaron a sus pares de tendencia liberal. Martínez dijo que un tema de la importancia de la reelección debe ser avalada por el pleno de la Corte Suprema.
Parece mentira, pero el relato anterior es prácticamente un calco de lo que hemos leído en la prensa venezolana hace unos años. Esta misma semana, Chávez presidiendo una reunión del ALBA, acompañado de los otros presidentes, le dio un espaldarazo a Ortega y celebraron la gran victoria de este por lograr el fallo de la CSJ a su favor.
Por contra parte, a penas desde el Gobierno de los EE.UU. se escucho una queja por el procedimiento y violación de la Constitución del pequeño país centro americano.
Ni la OEA, ni los otros gobiernos de los países latinoamericanos se han pronunciado. Seguramente el Sr. Insulza argumentara que ellos no se pueden meter en asuntos internos de los países. La verdad… mas de lo mismo.
Todavía esta caliente el caso de Honduras, en donde por enfrentar a la franquicia bolivariana le cayo encima todo el mundo. Chávez se mueve libremente y, poco a poco, apoyado en los petrodólares esta consolidando su “revolución” Castro-Chavista.
Veremos si los nicaragüenses demócratas podrán resistir esta trampa de la reelección, que impone en cada país la franquicia bolivariana; fiebre reeleccionista que hasta Uribe en Colombia esta apunto de asumir. ¿Quien será el próximo presidente que busque quedarse? ¿Será Lula en Brasil, a pesar que ha asegurado muchas veces que no buscaría su reelección? En pocos meses se sabrá…