09-10-09 - Eduardo Guerra
Como si estuvieran dentro de un cuento surrealista, los habitantes de Venezuela viven literalmente tras las rejas para poder defenderse de la delincuencia. Y aunque parezca que el titulo de este artículo es solo una metáfora tremendista para llamar la atención de los lectores, tristemente resulta que no lo es…
Es verdad que en los últimos 40 años, en la tierra de Bolívar se ha vivido una situación de inseguridad digna de estudio; pero lo que nadie puede negar es que en la última década, bajo el gobierno de Hugo Chávez, el tema de la inseguridad se ha convertido en una verdadera tragedia.
Serian muchas las historias trágicas que pudiéramos contar, pero nos limitaremos a comentar solo dos testimonios de amigos que han regresado recientemente del tan bello, pero tan sufrido país.
Y es que los delincuentes han sofisticado el modus operandi de sus acciones. Hace días un amigo me contaba que a una victima de secuestro express, una vez abordado en su coche, los malhechores le pidieron que no se resistiera porque ellos sabían todos sus datos, rutinas y costumbres, así como los de su familia. Lo llevaron a la agencia bancaria para que retirara de la taquilla todo el dinero que tenia en la cuenta, luego fueron hasta su casa y lo desvalijaron de todas las prendas y artefactos eléctricos de valor. Siempre le advirtieron que no le harían nada a su esposa e hija, pero eso si, tendría que colaborar ampliamente con ellos. Al final salieron de la casa de la victima, y por haberse comportado correctamente, lo liberaron en la autopista, regalándole 20.000 Bs. para que tomara un taxi. Hasta aquí, el cuento es una historia común, pero resulta que pasados quince días, el martirizado ciudadano recibió una llamada en el móvil de sus “amigos” los secuestradores, para pedirle un favor; y es que necesitaban que le recomendara a un amigo de él, al cual tenían secuestrado, que colaborara, que le explicara a la nueva victima que ellos cumplían su palabra, que eran unos ladrones serios… A fin de cuenta los macacos no querían matarlo y le rogaban que convenciera a su amigo para que cediera. Casi una comedia… Esto demuestra el grado de impunidad con el que están operando los delincuentes.
Otro testimonio fue el de una señora que tenía más de cinco años sin ir a Venezuela, en donde todavía tiene una pequeña casa en una urbanización de la ciudad de Maracaibo.
Cuando ella se vino a vivir a Tenerife, recuerda que en la entrada de la urbanización donde vivía habían instalado una alcabala, con una garita para que un vigilante controlara a todas las personas que salían o entraban; pero su sorpresa fue cuando vio que en cada calle de la urbanización habían instalado otras garitas adicionales a la de la entrada. Para completar la seguridad, todas las casas están rodeadas con una cerca electrificada, algo que sus antiguos vecinos y familiares le mostraron con cierto orgullo, por lo seguro que era ahora dormir y vivir en ese sitio. Su mayor asombro fue ver como sus amigos y familiares viven con naturalidad su prisión, que conviven con el temor que a diario les recorre todo el cuerpo, al parecer sin darse cuenta de su tragedia.
En otras palabras, los venezolanos padecen lo que los sociólogos llaman la “humildad aprendida”, un mecanismo colectivo que le permite a los seres humanos aceptar con resignación las amenazas que lo rodean, disimulando que no les importa; a fin de cuentas es un mecanismo de defensa psicológico para sobrevivir la pena.
Pero las dos historias anteriores no son más un pequeño reflejo de las terribles estadísticas de la inseguridad con la que se vive en Venezuela.
Según el Observatorio Venezolano de la Violencia (OVV) que dirige el sociólogo Roberto Briceño León, al ritmo que van los asesinatos, este año 2009 cerrará con 4 mil asesinatos más que el año 2008, para alcanzar la estrafalaria cifra de 19 mil homicidios.
En este momento, según la OVV, con estas cifras, Venezuela es el país más violento de Latinoamérica, Caracas es seis veces más violenta que Bogota y tres veces más violenta que Medellín, y ocurren más asesinatos que en Sao Pablo, Brasil, la segunda ciudad más poblada del mundo(40 millones de habitantes). A esta cifra de 19 mil asesinatos, las autoridades bolivarianas no le suman las muertes que ocurren en los enfrentamientos entre bandas y con las policías.
Los secuestros son la orden del día, y hay gente con mas de 7 años secuestrados, dicen, en manos de las guerrillas colombianas, y que aun pagando el rescate no los han liberado
En todas las encuestas, la inseguridad aparece como el problema numero uno a resolver, a juicio de la gran mayoría de los venezolanos; el país se desangra y las autoridades rojas rojitas, bien gracias…
¿Y como se explica todo este desastre?
- Porque el gobierno del teniente coronel desarmo prácticamente a todas las policías municipales, dejándoles apenas un antiguo revolver a cada policía; todo por el temor a que nuevamente estas se le resistan, como cuando lo enfrentaron en su intento de golpe de estado del año 92.
- Porque ha destruido la institucionalidad, usurpando la división de los poderes públicos.
- Porque esta utilizando los tribunales de justicia para perseguir y meter presos a los dirigentes de la oposición.
- Porque saco de la policía científica – CICPC - y de la - Policía Metropolitana - a los policías honestos, funcionarios de carrera y los sustituyo por aquellos que habían sido expulsados por malas conductas y delincuentes.
- Porque nunca quiso implementar algún plan de represión policial, en la teoría que la delincuencia es solo producto de la pobreza, cayendo en la contradicción de mostrar supuestas bajas de los índices de pobreza, y por el contrario presentando un aumento exponencial de la inseguridad.
- Porque convirtió en héroes de la Revolución Bolivariana a los matones del Puente Llaguno (abril 2002) y condeno a la pena máxima de 30 años a los Comisarios Vivas, Forero y Simonovis.
- Porque según los diputados de la Asamblea Nacional roja rojita, existen entre 9 y 15 millones de armas ilegales en manos de los civiles, y por esa razón están apurados en legislar al respecto.
- Porque el Gobierno chavista ha convertido a los malandros más violentos de los barrios marginales venezolanos, en su fuerza de choque para que repriman a los ciudadanos, cuando a las Policías y la Guardia Nacional no les conviene. A cambio estos delincuentes se han apoderado del tráfico de drogas y de la vida de todos los pobres que viven en los barrios marginales.
- Porque Chávez y sus secuaces andan en coches blindados y rodeados de guardaespaldas.
- Porque es un Gobierno ineficiente, corrupto y pare Ud. de contar.
Aun así, y a pesar de la inseguridad los venezolanos se atreven, y tienen un dicho que dice así:
“Venezuela es el mejor país del mundo para vivir, sin Chávez…; y el segundo mejor país del mundo para vivir, es Venezuela aun con Chávez…”
Es verdad que en los últimos 40 años, en la tierra de Bolívar se ha vivido una situación de inseguridad digna de estudio; pero lo que nadie puede negar es que en la última década, bajo el gobierno de Hugo Chávez, el tema de la inseguridad se ha convertido en una verdadera tragedia.
Serian muchas las historias trágicas que pudiéramos contar, pero nos limitaremos a comentar solo dos testimonios de amigos que han regresado recientemente del tan bello, pero tan sufrido país.
Y es que los delincuentes han sofisticado el modus operandi de sus acciones. Hace días un amigo me contaba que a una victima de secuestro express, una vez abordado en su coche, los malhechores le pidieron que no se resistiera porque ellos sabían todos sus datos, rutinas y costumbres, así como los de su familia. Lo llevaron a la agencia bancaria para que retirara de la taquilla todo el dinero que tenia en la cuenta, luego fueron hasta su casa y lo desvalijaron de todas las prendas y artefactos eléctricos de valor. Siempre le advirtieron que no le harían nada a su esposa e hija, pero eso si, tendría que colaborar ampliamente con ellos. Al final salieron de la casa de la victima, y por haberse comportado correctamente, lo liberaron en la autopista, regalándole 20.000 Bs. para que tomara un taxi. Hasta aquí, el cuento es una historia común, pero resulta que pasados quince días, el martirizado ciudadano recibió una llamada en el móvil de sus “amigos” los secuestradores, para pedirle un favor; y es que necesitaban que le recomendara a un amigo de él, al cual tenían secuestrado, que colaborara, que le explicara a la nueva victima que ellos cumplían su palabra, que eran unos ladrones serios… A fin de cuenta los macacos no querían matarlo y le rogaban que convenciera a su amigo para que cediera. Casi una comedia… Esto demuestra el grado de impunidad con el que están operando los delincuentes.
Otro testimonio fue el de una señora que tenía más de cinco años sin ir a Venezuela, en donde todavía tiene una pequeña casa en una urbanización de la ciudad de Maracaibo.
Cuando ella se vino a vivir a Tenerife, recuerda que en la entrada de la urbanización donde vivía habían instalado una alcabala, con una garita para que un vigilante controlara a todas las personas que salían o entraban; pero su sorpresa fue cuando vio que en cada calle de la urbanización habían instalado otras garitas adicionales a la de la entrada. Para completar la seguridad, todas las casas están rodeadas con una cerca electrificada, algo que sus antiguos vecinos y familiares le mostraron con cierto orgullo, por lo seguro que era ahora dormir y vivir en ese sitio. Su mayor asombro fue ver como sus amigos y familiares viven con naturalidad su prisión, que conviven con el temor que a diario les recorre todo el cuerpo, al parecer sin darse cuenta de su tragedia.
En otras palabras, los venezolanos padecen lo que los sociólogos llaman la “humildad aprendida”, un mecanismo colectivo que le permite a los seres humanos aceptar con resignación las amenazas que lo rodean, disimulando que no les importa; a fin de cuentas es un mecanismo de defensa psicológico para sobrevivir la pena.
Pero las dos historias anteriores no son más un pequeño reflejo de las terribles estadísticas de la inseguridad con la que se vive en Venezuela.
Según el Observatorio Venezolano de la Violencia (OVV) que dirige el sociólogo Roberto Briceño León, al ritmo que van los asesinatos, este año 2009 cerrará con 4 mil asesinatos más que el año 2008, para alcanzar la estrafalaria cifra de 19 mil homicidios.
En este momento, según la OVV, con estas cifras, Venezuela es el país más violento de Latinoamérica, Caracas es seis veces más violenta que Bogota y tres veces más violenta que Medellín, y ocurren más asesinatos que en Sao Pablo, Brasil, la segunda ciudad más poblada del mundo(40 millones de habitantes). A esta cifra de 19 mil asesinatos, las autoridades bolivarianas no le suman las muertes que ocurren en los enfrentamientos entre bandas y con las policías.
Los secuestros son la orden del día, y hay gente con mas de 7 años secuestrados, dicen, en manos de las guerrillas colombianas, y que aun pagando el rescate no los han liberado
En todas las encuestas, la inseguridad aparece como el problema numero uno a resolver, a juicio de la gran mayoría de los venezolanos; el país se desangra y las autoridades rojas rojitas, bien gracias…
¿Y como se explica todo este desastre?
- Porque el gobierno del teniente coronel desarmo prácticamente a todas las policías municipales, dejándoles apenas un antiguo revolver a cada policía; todo por el temor a que nuevamente estas se le resistan, como cuando lo enfrentaron en su intento de golpe de estado del año 92.
- Porque ha destruido la institucionalidad, usurpando la división de los poderes públicos.
- Porque esta utilizando los tribunales de justicia para perseguir y meter presos a los dirigentes de la oposición.
- Porque saco de la policía científica – CICPC - y de la - Policía Metropolitana - a los policías honestos, funcionarios de carrera y los sustituyo por aquellos que habían sido expulsados por malas conductas y delincuentes.
- Porque nunca quiso implementar algún plan de represión policial, en la teoría que la delincuencia es solo producto de la pobreza, cayendo en la contradicción de mostrar supuestas bajas de los índices de pobreza, y por el contrario presentando un aumento exponencial de la inseguridad.
- Porque convirtió en héroes de la Revolución Bolivariana a los matones del Puente Llaguno (abril 2002) y condeno a la pena máxima de 30 años a los Comisarios Vivas, Forero y Simonovis.
- Porque según los diputados de la Asamblea Nacional roja rojita, existen entre 9 y 15 millones de armas ilegales en manos de los civiles, y por esa razón están apurados en legislar al respecto.
- Porque el Gobierno chavista ha convertido a los malandros más violentos de los barrios marginales venezolanos, en su fuerza de choque para que repriman a los ciudadanos, cuando a las Policías y la Guardia Nacional no les conviene. A cambio estos delincuentes se han apoderado del tráfico de drogas y de la vida de todos los pobres que viven en los barrios marginales.
- Porque Chávez y sus secuaces andan en coches blindados y rodeados de guardaespaldas.
- Porque es un Gobierno ineficiente, corrupto y pare Ud. de contar.
Aun así, y a pesar de la inseguridad los venezolanos se atreven, y tienen un dicho que dice así:
“Venezuela es el mejor país del mundo para vivir, sin Chávez…; y el segundo mejor país del mundo para vivir, es Venezuela aun con Chávez…”
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